- Volver a la página principal »
- Horreos gallegos
Salimos de Valladolid en dirección a Orense por la A 52, para desviarnos a 329 Km en la salida de Allariz. En apenas 8 Km. llegaremos a nuestro primer destino, A Merca, municipio orensano donde podemos ver el grupo de hórreos más numeroso de España, con 34 hórreos y el segundo de Europa, después de Lindoso, en Portugal, que tiene 62 canastros. Estas construcciones no se encuentran en su ubicación original, ya que fueron trasladados a este lugar en los años 70. Dispuestos de forma escalonada, están construidos de la manera más tradicional, en madera, excepto dos, que son mixtos. Cruzando la carretera recomiendo perderos un rato caminando por las estrechas calles del pueblo, donde veremos algún que otro hórreo y una pequeña Ermita.
Deshacemos el camino andado y nos desplazamos a Allariz, un pueblo de Orense con mucho encanto. Tras aparcar el coche en el Campo da Barreira, una explanada que está justo al lado del centro urbano (los sábados hay mercado y no se puede aparcar), nos dirigimos a comer al Restaurante Pallabarro.
Terminada la comida, merece la pena pasear por las calles empedradas, donde encontraremos algún edificio blasonado como la Casa Torre de Castro Oxea, situada en la Rúa da Cruz con una fachada barroca de 1748. Llegamos al corazón de la villa, la Plaza Mayor, donde podemos ver el Ayuntamiento y la iglesia de Santiago, una construcción románica, de cuyos exteriores son de resaltar el ábside, sus dos portadas, una de ellas la situada bajo un bello rosetón y los numerosos canecillos. Si dejamos la Plaza y seguimos por la Rua da Cárcel llegaremos a la iglesia románica de Santo Estevo, en donde son de resaltar los canecillos del alero.
Allariz cuenta además con un importante número de tiendas outlet de las principales marcas de moda y complementos, que incluso están abiertas domingos y festivos.
No quiero dejar de mencionar el puente románico de Vilanova, uno de los lugares más emblemáticos de Allariz. Junto al puente se localiza una playa fluvial y una senda, que discurre junto al río Arnoia, que te permitirá disfrutar de un agradable paseo. A escasos metros del puente se encuentra la iglesia Santa María y frente a la fachada barroca podemos ver un interesante cruceiro del siglo XVI.
Volvemos de nuevo a la esplanada donde dejamos el coche, para detenernos en el Convento de Santa Clara, que al ser de clausura tan solo es visitable la iglesia y el Museo de arte sacro, en donde una de las piezas más interesantes es la magnífica talla de marfil de la Virgen Abridera del siglo XIII, que representa a la Virgen con el niño mostrando escenas de la vida de ambos.
Dentro del Monasterio nos cuentan que hay un enorme claustro barroco, que no podemos ver porque pertenece a la zona de clausura de las monjas clarisas. A un lado del convento, se sitúa la Iglesia de San Benito, patron de la villa, en donde lo más resaltable es su torre-campanario. A cada lado de la iglesia podemos ver dos bellos cruceiros.
Damos por terminado nuestro recorrido por Allariz para poner rumbo a Orense, de donde nos separan 24 Km. dando por finalizado este primer día. Nos alojamos como cada vez que visitamos Orense en el céntrico Hotel NH.
El segundo día nos encaminamos hacia Pontevedra, de donde nos separan 116 Km.
A escasos kilómetros de la ciudad de Pontevedra se encuentra la localidad de Poio, desde donde nos dirigiremos hasta el Monasterio de San Juan, en cuyos exteriores podemos admirar un impresionante hórreo, de finales del siglo XVIII. No es el más largo, pero sí el más grande en superficie de la comunidad autónoma gallega y es tanta su capacidad que su interior está dividido en varias cámaras donde almacenar la gran cantidad de grano (tiene un volumen de 123 metros cúbicos). Tiene 17 filas de tres pies, un ancho que supera los tres metros (3,36 m.) y una longitud de 33,46 metros, con un tejado a cuatro aguas.
Una breve reseña del Monasterio de San Juan, un conjunto monástico con más de mil años de antigüedad, situado en un promontorio desde donde disfrutar de unas estupendas vistas a la ría de Pontevedra y a la isla de Tambo, lugar donde antaño se retiraban los monjes benedictinos. Ocupado por monjes benedictinos hasta 1835, en que fueron expulsados, con motivo de la desamortización de Mendizábal, pasando a partir de dicho momento a estar ocupado por la orden de los mercedarios. El conjunto monástico está ocupado por dos Monasterios, el antiguo con su iglesia y dos claustros y el moderno, lugar en donde se encuentra la Hospedería.
La iglesia se levantó entre los siglos XVI y XVIII, mezcla de los estilos del periodo: el Renacimiento y el Barroco. Del exterior del templo, resaltar la grandiosidad de su fachada, flanqueada por dos torres-campanario y del interior, muy austero, destacar el retablo mayor ornamentado con las características columnas salomónicas. Un par de curiosidades: las numerosas sepulturas que podemos ver a lo largo del piso y la tumba suevo-visigoda de Santa Trahamunda, junto a una talla que representa a la santa con una rama de palmera y que popularmente es considerada la patrona de la “morriña”. No debemos perdernos la visita de los dos claustros: El claustro de las “procesiones”, levantado a finales del siglo XVI en estilo renacentista, con una fuente barroca en el centro. El claustro de la “portería”, del siglo XVIII, con un cruceiro en el centro y en cuyas paredes podemos admirar un gigantesco mosaico del Camino de Santiago, compuesto por miles de teselas en 80 metros de largo, lo que te permitirá “peregrinar” desde Roncesvalles hasta Santiago de Compostela sin moverte del claustro.
La biblioteca, es otro de los lugares de interés que recomiendo visitar si dispones de tiempo. En su interior, guarda más de 100.000 ejemplares, la mayoría traídos por las diversas ordenes que por allí pasaron. Entre los libros curiosos que puedes ver, se encuentra un ejemplar de la última biblia poliglota que se hizo en Europa en 1657 y el libro más pequeño del mundo que contiene el “Padrenuestro” en siete idiomas.
Ponemos rumbo a Combarro, de donde nos separan 6 Km. Considerado uno de los pueblos costeros más bonitos de Galicia, su fama le viene gracias al espectacular conjunto de más de 60 hórreos, aunque sólo 30 de ellos se asoman al mar. Además de los hórreos hay un total de nueve cruceiros, la mayoría de ellos del siglo XVIII y están labrados en granito con la imagen de la Virgen y Jesús, poseen la particularidad de que la imagen de la Virgen se encuentra orientada hacia la ría, mientras que la de Cristo, lo hace al interior (cruces de piedra características de Galicia).
Una vez aparcado el coche cerca del Puerto deportivo, iniciamos la marcha caminando por la pintoresca Rúa de Mar, una de las calles más bonitas de Combarro, aquí es donde se encuentran la mayor parte de los hórreos, situados junto al mar perfectamente alineados, nos dejara una imagen irrepetible y sorprendente.
Hacemos un alto en el camino y nos detenemos a comer en Restaurante “O Bocoi”, un local con unas vistas inmejorables, pegado a la ría, donde recomiendo especialmente pedir arroz con pulpo, la empanada de berberechos y las vieiras.
Terminada la comida, continuamos el paseo, que nos conducirá a la Plaza da Fonte, lugar donde se encuentra uno de los cruceiros más antiguos y finalmente llegaremos a la playa urbana de Padrón, desde donde tienes una de las más típicas panorámicas de Combarro. Si la marea está baja, como fue el caso durante mi visita, te recomiendo que partiendo de ella recorras toda la zona de la ría viendo los hórreos de Rúa do Mar desde otra perspectiva. Otra de las calles imprescindibles que ver es la Rúa de San Roque. donde encontramos a cada paso pequeñas plazas con mucho encanto y con cruceiros. Según avanzamos nos encontramos con la pequeña Iglesia que da nombre a la calle.
Otros atractivos en esta zona: Si quieres alargar la visita, Combarro se encuentra en el centro de las Rías Baixas y a poca distancia de grandes lugares turísticos como Cambados, Sanxenxo, el Grove o la isla de Arosa. Se me olvidaba, a medio camino entre Cambados y Combarro, entre las rías de Pontevedra y Arosa, te recomiendo hacer una parada en el Monasterio de Armenteira en Meins. Se trata de un monasterio cisterciense del siglo XII, actualmente convertido en hospedería, un lugar para buscar paz y tranquilidad, siendo respetuoso con la vida de la comunidad de religiosa que lo habita. Antes o después de visitar el monasterio te recomiendo la ruta de senderismo Ruta da Pedra e da Auga, que discurre paralela al río Armenteira, una ruta sencilla y muy vistosa, perfecta para hacer con niños.
Once kilometros nos separan de Sanxenxo, lugar donde tenemos el Hotel. En esta ocasion nos hemos decidido por el Hotel Carlos I, con excelente ubicacion a pocos pasos de la playa, buenas las instalaciones del Spa y piscina climatizada. En otros viajes, nos alojamos en el Hotel Nuevo Astur, a 4 Km. de Sanxenxo. Ambos hoteles son recomendables, especialmente el primero.
El tercer dia ponemos rumbo a la localidad de coruñesa Rianxo, de donde nos separan 52 kilómetros, para seguir dirección Padrón y llegar a un cruce con la C-550 en Taragoña, donde cogeremos dirección a la parroquia de Araño. Una vez allí tomaremos un desvío a mano izquierda y a unos 50 metros del mismo aparecerá la Iglesia de Santa Baia a cuyo lado se encuentra el hórreo, dentro de una finca cerrada por un muro de piedra que pertenece a la rectoral. La particularidad de este hórreo es la se ser el más largo de Galicia y el que se apoya sobre un gran muro de mampostería y no sobre varios pies, que es lo más habitual. Posee por dimensiones exteriores 37,05 metros de largo, 2,40 de ancho y 2,70 de altura, con dos puertas que se abren en la parte longitudinal que mira hacia iglesia, pero solamente una conserva la escalera de acceso. A escasos metros del hórreo encontramos dos edificios: La iglesia barroca de Santa Baia, no tiene nada significativo a nivel arquitectónico y junto a ella la moderna capilla dedicada a Nuestra Señora de los Milagros de Araño.
Nos desplazmos hasta Lira, parroquia de Carnota, a 55 kilómetros de Rianxo. Esta localidad cuenta con un horreo que hace la competencia en longitud y belleza con el de Carnota, que visitaremos posteriormente. Este hórreo, que data del siglo XVIII, presume de ser el segundo con mayor longitud de Galicia con algo más de 36,53 metros de longitud y 1,60 metros de ancho. Se levanta sobre 22 pares de pies y se sitúa en una zona privilegiada, con vistas a la playa de Carnota, la más larga de Galicia y el monte Pindo, lo que hace un enclave espectacular. El conjunto monumental, también cuenta con un palomar situado justo en los aledaños del hórreo. Terminamos la visita en el cementerio, donde panteones de piedra destacan sobre las tumbas más humildes decoradas curiosamente con "conchas de vieira". El conjunto se completa con la iglesia parroquial, de estilo barroco.
Un alto en el camino y parada para comer en Restaurante Xouba. Comida casera y de calidad, a detacar el pulpo, las zamburiñas y el salpicon de rape y langostinos. Atencion inmejorable, un lugar para repetir.
Terminada la comida, nos desplazamos cinco kilometros hasta Carnota. El hórreo que vamos a visitar se encuentra en el mismo pueblo y ha sido declarado Monumento Nacional. Construido en el siglo XVIII por el arquitecto Gregorio Quíntela, es de planta rectangular, presenta cámara cerrada con hileras horizontales que dejan entre ellas grietas para la ventilación: tiene 34,74 metros de largo por 1,90 de ancho, apoyado sobre 22 pares de pies y tres puertas en uno de los lados, formando parte de un bello conjunto monumental, que impresiona al verlo. Su cubrición es a dos aguas y en sus esquinas se elevan dos pináculos y una cruz. Lo primero que encuentras al llegar es la Iglesia de Santa Comba, junto a ella la casa rectoral (Es habitual que los grandes hórreos se sitúen cerca de iglesias y casas rectorales, ya que normalmente les pertenecían, para guardar parte de las cosechas que obligaban al pueblo a entregar el conocido “diezmo”), un palomar, el hórreo pequeño y el hórreo grande, el que sin lugar a dudas es la estrella del conjunto monumental.
Tras la visita, se impone un paseo por la playa
de Carnota, que con sus mas de 7 Km de longitud, esta considerada la mas larga de Galicia y un baño en las frías aguas de las piscinas de A Boca do Río. en la zona de rocas de la desembocadura del rio.
Cogemos de nuevo el coche para desplazarnos hasta Caldebarcos, a 6 Km de Carnota. En esta localidad nos alojamos en el pequeño Hotel "Meiga Do Mar", situado frente a la playa y con unas buenas vistas.
Otros atractivos en esta zona: Si quieres alargar la visita,
el precioso pueblo pesquero de Muros se encuentra a 17 Km de Carnota. La cascada de Ezaro a 37 Km de Carnota es otro de los atractivos que no debes perderte, un impresionante salto de agua de mas de 40 metros de altura procedente del rio Xallas directamente al mar. A poca distancia de la cascada y frente a la playa recomiendo el pequeño Hotel O Ezaro. La Ruta de los Faros por la Costa de la Muerte, es tambien de interes si dispones de mas tiempo.
Fin de esta interesante ruta y vuelta para Valladolid.
Otras sugerencias y curiosidades.
* No podemos cerrar este repaso por los conjuntos de hórreos más espectaculares de Galicia sin nombrar Santa María de Quins, en Melón, también en la provincia de Ourense. Es un grupo de 24 hórreos de piedra y con cubierta de teja, muchos de ellos semi destruidos. Son especialmente encantadores porque se sitúan en una cima junto a la iglesia del pueblo y por su especial disposición parecen estar trepando colina arriba.
* Espero saber explicar las diferencias entre "Hórreo gallego y asturiano". La palabra hórreo viene del latín horreum, que significa granero. Son construcciones dedicadas a guardar y conservar alimentos agrícolas, para alejarlos de la humedad y los roedores. Encima de los pies o pegollos, normalmente de piedra o madera, se encuentran las “pegolleras” o “tornaratos”, muelas de piedra caliza, que evitan la subida de ratones. En Asturias hay dos tipos de construcciones: El más numeroso de ellos, el Hórreo, dispone del tejado a cuatro aguas, son de planta cuadrada sobre cuatro pilares y si es de planta rectangular, lleva seis o más pilares, se llama Panera, con el tejado con caballete y a cuatro aguas. Tanto el hórreo como la panera suelen tener ornamentos o grabados en la madera, clasificándose en tres estilos, según la zona de localización: Allande, (Los más tradicionales y sencillos, sus elementos decorativos son aislados), Villaviciosa (Son los más antiguos y suelen caracterizarse por un arco sobre la puerta de entrada, similar a las portadas de las iglesias románicas) y Carreño (Es el estilo más espectacular de todos, porque consta de muchos elementos decorados, especialmente en las puertas principales) y algunos, pueden tener en su perímetro una corredera con balaustrada. La principal diferencia con los hórreos gallegos, es que los asturianos son desmontables, todas sus partes deben unirse por encajes, no con clavos ni tornillos. El Hórreo gallego, normalmente es rectangular, con seis u ocho pies. Poseen la cubierta a dos aguas, en pizarra o teja y generalmente se llama Cabazo, es de planta rectangular, más estrecho que la panera asturiana, con gran diferencia entre los lados mayores y menores. El cerramiento suele estar construido de piedra, cimentado en dos paredes, prolongación de sus cabeceras que le sirven de pies.
* Nota del autor: No he recibido ningún tipo de compensación (Económica o material) por escribir este artículo, no teniendo relación alguna con los locales mencionados, siendo la mía una opinión independiente y personal.
Jose Maria Vicente
Muy buen resumen de esta construcción típica Gallega , un gallego en el exilio.
ResponderEliminarGracias por tu comentario.
Eliminar